04 febrero 2010

Como es la vida

Os voy a relatar un caso. Pero si estáis en un día muy sensible mejor no sigáis leyendo.

Samantha Rouse es una auxiliar de enfermería inglesa que esta casada y tiene 3 hijos. El más pequeño se llama Jacob. Un día le hizo una foto a su pequeño de tan solo 9 meses y se dió cuenta que un ojo aparecía completamente blanco. Extrañada se lo dijo a su médico. Este no le dió ninguna importancia aduciendo que sería cosa del flash de la cámara.

Sin embago Samantha no quería confiarse. Insistió e insistió hasta que lo llevaron al hospital y le hicieron un análisis. Lo que no esperaban era la noticia que le darían. Su hijo tenía un tipo muy raro de cáncer llamado rinoblastoma. Este se forma en la retina. Crece rápidamente. Y con esa edad podría acabar con la vida del pequeño en muy poco tiempo.

Por si acaso comprobaron los ojos de su otro hijo, Harry, de dos años y a su hija, Phoebe, de tres. La niña no presenta ningún indicio. Pero Harry también presenta algunos puntos blancos que están investigando.

El pequeño Jacob recibe ahora quimioterapia y un tratamiento con rayos láser cada 3 semanas. Aún así ha perdido completamente la visión en su ojo izquiero, a causa de 3 grandes tumores que le tapaban el área de visión. Y la batalla, y el tratamiento, continúa para salvarle el derecho. Aunque en este caso los médicos son muy optimistas.

Según palabras de la madre, recomienda a todos los padres que le hagan una sencilla prueba a sus hijos. Aunque no es bueno hacer fotos con flash a los niños, porque les puede provocar daños irreversibles, parece que una única foto puede ser mucho más saludable que no hacer nada.
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5 comentarios:

  1. Ay pobrecillo...espero y deseo que se recupere..menos mal que esto no me lo has mandado por e-mail sino pensaria que es una cadena de ess...un beso churrin...

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  2. Lo triste es que algunos medicos no sepan esto. En su profesión, más que en ninguna otra, es fundamental estar al día.

    Un abrazo.

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  3. Espero que se recupere de todo corazón.

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  4. Sin palabras ...soy madre y me he quedado muda.

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  5. Qué lástima, espero que se cure y no sufra... Pobre criatura.

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